El mundo entero estuvo pendiente de la tragedia que protagonizaron estos 33 hombres, enterrados durante 69 días en la mina San José.
A los mineros les convirtieron en celebridades cuando su rescate fue transmitido en vivo por televisión en todo el mundo.
Los ingresos que la industria de la comunicación generó a través de la desgracia de estos hombres, es incalculable
Ademas de la edición de un libro,«Deep Down Dark» y la película «Los 33» protagonizada por Antonio Banderas.Se editaron todo tipo de publicaciones con la historia, vivencias, sufrimiento, de estos mineros. Desde la historia de un supuesto romance de uno de ellos con una mujer europea, hasta el rendimiento político que gobernantes del país iberoamericano aprovecharon descaradamente.
Un gran negocio de millones de $. Un gran negocio para todos los participantes en el entorno del acontecimiento.
¿Y los mineros?
Estos años no han sido fáciles para ninguno de los 33 obreros quienes quedaron marcados por la desgracia. Sólo unos pocos han podido recuperar la estabilidad que tenían antes del accidente y transformar la tragedia en una nueva oportunidad.
«miedo»
Muchos se encuentran sin empleo fijo debido al «miedo» de los empresarios a contratarles.
El tirón que tuvieron en la sociedad les llevó a comprometerse que denunciarían cualquier situación de inseguridad laboral que se encontrasen en el futuro. Ahí reside ese «miedo».
Un grupo importante de ellos esta inmerso en una reclamación judicial, donde reclaman unos derechos de imagen que no perciben, y que argumentan con el asesoramiento interesado de los abogados que les asistieron en los contratos que firmaron a su salida de la mina.
Injusticias
La vida no es justa. Esto es una obviedad. Pero con las cantidades millonarias que se han generado, a costa de transformar la tragedia de 33 personas en el mayor espectáculo del mundo, es inadmisible, que estén en condiciones precarias en la actualidad. Mas cuando continúan siendo uno de los temas recurrentes sobre los que se continúa generando actualidad y dinero.
